Wonder
por R. J. Palacio
Wonder nos presenta a August, un chico que nació con una mutación genética que le ocasionó una severa malformación facial, quien tras haber sido educado en casa toda su vida empezará a asistir a una escuela regular.
My name is August, by the way. I won’t describe what I look like. Whathever you are thinking, it’s probably worse. (Palacio, 2012: 3)
En general la historia es bonita y busca trasmitir un claro mensaje. Aunque he de admitir que no me gusto mucho la forma tan obvia en que terminó expresándolo la autora, en especial con el discurso final de Mr. Trushman. De todas formas es algo a lo que no di tanta importancia por entender que el libro está dirigido principal a un público infantil.
Los personajes se me antojaron muy reales, en especial, August, Via y Jack.
August no sencillamente era este personaje al que todo le parecía maravilloso y aceptaba todo sin problemas. Era evidente que tenía sus complejos con respecto a su apariencia y que por años había luchado por aceptar su situación, hasta llegar al punto en que aun consciente de su condición no permitía que esta le impidiese disfrutar su vida.
Jack, sometimes you don’t have to mean to hurt someone to hurt someone. (Palacio, 2012: 137)
Con respecto a Jack y Via siento que sus acciones a lo largo de la historia fueron en mi opinión bastante realistas, simplemente se comportaron como humanos: errando y aprendiendo.
Disfruté mucho de la lectura, salvo por la parte en la que se hizo uso del mismo recurso que David Levithan usara en Will Grayso, Will Grayson, escribiendo sin aplicar el uso correcto de las mayúsculas. En Wonder se me hizo aun más molesto ya que ni siquiera se identificaban las conversaciones. Y aunque entiendo la razón por la que Levithan hizo uso de este estilo, no logro entender que motivó a Palacio a hacer lo mismo.
Emocional y reflexivo, sin dudas este es un libro altamente recomendado, tanto para los más pequeños como para los más grandes del hogar.